El Jubileo de 2025 comenzó oficialmente el 24 de diciembre de 2024, con el rito de la Apertura de la Puerta Santa de la Basílica Papal de San Pedro por parte del Santo Padre, que presidió a continuación la celebración de la Misa Nocturna de la Natividad del Señor en el interior de la Basílica. El año terminará en Roma el 6 de enero de 2026.
El Arzobispo Richard Henning inauguró oficialmente el Año Jubilar en Boston el 29 de diciembre de 2024 en la Catedral de la Santa Cruz. El Año Jubilar en Boston concluirá el 28 de diciembre de 2025.El Santo Padre desea que el Año Jubilar sea un "momento de encuentro genuino y personal con el Señor Jesús, la ‘puerta’" (cf. Jn 10, 7-9) (Spes Non Confundit, 1).
Queremos llegar a los marginados de la sociedad (presos, ancianos, enfermos, pobres) y a los marginados de nuestras parroquias (los que no conocen a Jesús). Queremos fomentar en ellos la sed de Jesucristo mismo y la curiosidad por Él, para que acepten la invitación a encontrarse con Él en nuestras parroquias y sitios de peregrinación. Para nuestros feligreses, esperamos que este Año Jubilar fomente la determinación de ser un signo de esperanza para los demás y suscite un mayor conocimiento de la misericordia de Dios, ya que son «corresponsables de asegurar que los múltiples signos de esperanza den testimonio de la presencia de Dios en el mundo (SNC, 17).
El Papa Francisco nos anima a cada uno de nosotros durante este Año Jubilar a encontrarnos con la misericordia del Señor y luego salir y ser un signo de esperanza para los demás. Podemos hacer esto de diferentes maneras, por ejemplo:
Mientras que los sitios de peregrinación ofrecen momentos especiales para la renovación espiritual, las parroquias son los lugares a los que acuden los peregrinos en busca de alimento y acompañamiento espiritual de manera frecuente. Las parroquias deben considerar cómo pueden seguir fomentando los frutos iniciados en los sitios de peregrinación, así como crear curiosidad y sed de Jesús para que la gente desee unirse a las gracias especiales de estos sitios. La Arquidiócesis de Boston proporcionará recursos para que las parroquias consideren cómo pueden ser lugares de acompañamiento y alimento espiritual durante este Año Santo, aunque también se les pide a las parroquias que pongan en práctica lo que consideren apropiado para su comunidad.
Para este Año Jubilar se podrán conceder Indulgencias a los fieles “verdaderamente arrepentidos, excluyendo todo afecto al pecado… movidos por espíritu de caridad…[que hayan sido] purificados a través del sacramento de la penitencia y alimentados por la Santa Comunión y oren por las intenciones del Sumo Pontífice” Bolletino N [00808-DE.01] 13 de Mayo, 2024. Además, los bautizados deben realizar uno de los siguientes actos específicos del Año Santo para que se les conceda la indulgencia: